4 de agosto de 2009

¡CUIDADO! Por ahí sí que no


La semana pasada acudí a una agencia de seguros, no suelo hacerlo pero tenía un buen motivo.

Posiblemente debido a la crisis, mi compañía de seguros me regala un interesante descuento en la renovación de mi póliza del coche (TR con franquicia, 16 años de antigüedad, sin siniestros) pero la crisis me induce a revisar todo y me dirijo a una agencia, en mi barrio, de una muy emblemática entidad aseguradora, tras haber consultado previamente, varias opciones de líneas directas etc.

La persona (supongo que un auxiliar) me informa “más o menos bien” (sin entrar, en detalles ni coberturas, solo primas, opciones y descuentos… total como lo necesito…). Al final me decido por contratar un terceros + lunas y asistencia en lugar de mantener mi anterior TR pues "Mi entidad" no me ofrece la posibilidad de fraccionar el pago sin generarme molestias (me pide que solicite crédito al banco ¡Con la que está cayendo!)

Lo dicho, voy a dejar a mi compañía tras 16 años por que no me facilita lo que preciso, le solicito a la chica que me prepare una propuesta…

- La chica me da un presupuesto.
- Le digo que quiero una propuesta
- Me ofrece una “simulación”
- Le digo que lo que quiero es una Propuesta de Seguro.
- Me dice que lo único que me puede dar es un presupuesto
.

Le doy las gracias y me voy a la Caja de Ahorros situada a 30 metros de distancia, tras repetir a la empleada todos los datos me da… ¡una Propuesta de Seguro!

Hoy traigo a este blog esta historia, mi objetivo no es la critica sino el aviso, avisar al lector, mediador de seguros, de que esta historia es verdad, y que ese camino es justo el que no se puede seguir, el que sin duda eliminará del mapa una función que no aporta nada en absoluto (insatisfacción tras la inicial indignación) y que será desarrollada (tendrá que serlo) de forma más profesional por aquel que así lo asuma.

Moraleja para sacar lo positivo de esta historia:

A) Conociendo mejor al cliente la compañía habría podido ofrecerle lo que precisaba (en este caso un fraccionamiento de pago mas sencillo) con lo que muy probablemente lo mantendría con un TR.

B) El agente tuvo una excelente oportunidad de captar un nuevo cliente, que va a verle a su despacho, a su terreno, además disponía lo que este buscaba (fraccionamiento de pago) y más argumentos (más entidad, rango de producto, etc.) Pero el cliente se va y no volverá a visitarla porque la percepción que tiene de la persona que le atendió es de una profesionalidad dudosa

C) Lo bueno de esta historia, a pesar de ser cierta, es que se trata de un caso aislado (al menos resulta gratificante creérlo)

Es la profesionalidad la que justifica la existencia de la función y su carencia la de su extinción, sea quien sea el mediador involucrado si no lo hace bien vendrá otro a hacerlo. No volveré a esa oficina por muy cerca que esté de mi casa, no la siento PRÓXIMA además cualquier promesa u oferta que me presente en un futuro no me resultará creíble fácilmente, mi percepción es que no me han tratado como es su responsabilidad hacerlo.

Gracias por su atención.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No diudo que el caso sea verdad pero no creo que un agente le niegue una propuesta de seguro a no ser por alguna causa.

Sergio dijo...

Realmente no creo que el agente lo haya negado porque quiere. El asunto es que con la picaresca de tener propuesta para tener una cobertura temporal y después no formalizar la póliza las compañías están optando por conceder solicitudes no vinculantes.

Una solicitud y una reserva de efecto tienen casi las mismas ventajas que una propuesta.

¿Por qué tanto empeño en la propuesta?

Anónimo dijo...

No creo que este caso sea frecuente dado que pocos clientes o exijen una propuesta.

Jaumet dijo...

Tampoco creo que sea el caso más frecuente....
Esa persona que le atendió estoy seguro que no era el titular del negocio, sino un empleado...y por cierto, no muy bueno.
Lo cierto es que muchas compañías han eliminado las propuestas y directamente emiten la póliza. Esa persona que le atendió no perdió tiempo en escucharle, quizás no supo explicarle por qué no le daba una propuesta o certificado de garantía.
Y sí, es cierto, la ventaja fundamental de los mediadores es saber escuchar y saber lo que necesita su cliente, y por supuesto proporcionárselo, y el titular de esa agencia perdió una póliza, o por lo que veo un cliente (que no es lo mismo) por tener un personal mal formado.

Y por parte de su antigua compañía: muy mal. No ha sabido adaptarse al mercado....

Buen artículo, es un claro ejemplo de lo que no se debe hacer.

www.rankia.com/blog/impresionesdelseguro